La Feria del libro es tradicionalmente un punto de encuentro de autores y lectores, que aprovechan esta cita para acercar distancias, conocerse y reavivar el gusto por la lectura. Este marco sirve, además, para acercar a otros grupos relacionados o interesados por la cultura, como grupos de teatro o medios de comunicación.
Es el caso de la última feria del libro de San Sebastián de los Reyes, que contó con la participación de Menudo Castillo, una emisora de radio infantil que viaja por todo el territorio nacional mostrando a niños y mayores los entresijos de este mágico medio de comunicación que logra tan sólo a través de la voz enganchar, emocionar y entretener a todo el público.
El artífice de toda esta locura radiofónica y cultural es Javier Fernández Jiménez, quien entrevistó a Eva Mª Llorente con motivo de la publicación de su segundo libro Mis primeros pasos de ballet 2. Durante la charla, la autora recordó sus vivencias como primera bailarina del Ballet de Cámara, habló de su experiencia docente y de cómo obras como esta pueden resultar muy útiles para los maestros. «Mis primeros pasos de ballet es una obra original que introduce a niños y niñas de entre 5 y 10 años en la técnica del ballet clásico mediante un enfoque accesible y lúdico. Al combinar texto e ilustraciones, el libro favorece la comprensión y la imitación de posturas, convirtiéndose en un recurso pedagógico que estimula tanto el aprendizaje autónomo como el guiado por docentes.» Además, compartió los avances de su investigación como doctora en formación. «Estoy haciendo un doctorado en Educación que tiene como objeto principal poner en valor la danza como herramienta para la mejora del rendimiento académico.» «Más allá de la enseñanza técnica, Mis primeros pasos de ballet 1 y 2 contribuyen al desarrollo de capacidades cognitivas y emocionales esenciales, tales como:
- Observación y atención, al invitar a los niños a fijarse en detalles de postura y movimiento.
- Memoria, al repetir y consolidar secuencias básicas de la técnica clásica.
- Autocrítica y autorregulación, al aprender a corregir posturas y valorar el propio progreso.
- Trabajo en equipo y cooperación, al fomentar dinámicas grupales y juegos compartidos en torno a la danza.
- Creatividad e imaginación, al transformar la práctica en una experiencia artística y expresiva.
- Constancia y disciplina, valores transmitidos de manera natural a través de la práctica del ballet.
Mis primeros pasos de ballet ofrece también a profesores y profesoras una herramienta didáctica innovadora para enriquecer sus clases, integrando lectura, juego y práctica corporal. De este modo, se convierte en un recurso que trasciende lo artístico y aporta al desarrollo integral de la infancia, fortaleciendo habilidades cognitivas, emocionales y sociales que acompañarán a los niños en su formación personal y colectiva.»
Eva Llorente 